La grua

Cuando vio la grua con un auto encima, le parecio que estaban recostados haciendo el amor en plena autopista. Iba a 65 millas por hora y estaba prohibido detenerse a contemplar escenas de amor. Estaba contenta por la imagen, aunque desconsolada por tener que seguir el camino deseando ser grua.
El trayecto de quince minutos fue suficiente para recordar que habian pasado cinco meses desde los ultimos labios que habia sentido su lengua, de llegar tarde a algun sitio olorosa a humedad y con el cabello desarreglado, de haber pedido un abrazo.
Corrio a la puerta de su apartamentito, a una cuadra de la oficina de policia de Chula Vista cuando una sirena entonaba la misma melodia de siempre. Prendio la computadora y en la pagina de "Love happens" busco en su perfil personal los mensajes enviados en las ultimas 24 horas. Habia uno del mismo marroqui de hacia una semana, pidiendole que le llamara a Marruecos porque pretendia una relacion seria.
Apago la computadora y se dedico a olvidarse de la grua por el resto del dia.