Junio

Su madre, en un mes de junio tomo la libreta y empezo a escribir una historia. La historia tiene inicio una madrugada en el cuarto del hospital general. Estaban esperando muchos ojos y unos brazos arrugados y morenos, los de la abuela que con un shh, shh, shh, ritmico y repetitivo apagaba cualquier llanto. La abuela vivia para ocupar su cuerpo-cuna con la nina. Su nieta "habia sacado los ojos de su abuelo", decia. La nieta encontro por primera vez el amor en los ojos cafe-obscuro de su abuela. La que en sus ultimos dias (sin confesarlo) se despedia con abrazos extendidos, los regalaba en el patio de cemento en la casa que habia construido el abuelo, desde donde se podia estudiar el mapa de Tijuana, en donde la nina habia aprendido a caminar, en donde estaban escritos capitulos de la vida familiar. Ahi fue donde la abuela en el ultimo abrazo a su nieta le dijo al oido "yo siento tanto amor por ti mija". Esas palabras son eco eterno en la memoria de la nieta.
Lo mas bello de la extensa historia que empezo aquel junio es la abuela, por eso no creo necesario relatar los acontecimientos fuera de ella.